Barras antivuelco
Las barras antivuelco evitan en gran medida que la carrocería del vehículo pueda deformarse en caso de vuelco o impacto. De esta manera minimizar los posibles daños que puedan sufrir los ocupantes del vehículo evitando que éstos puedan quedar atrapados dentro del vehículo o que puedan causarse heridas debidas a la deformación de la carrocería.
Según la actividad a la que destinemos el vehículo, las barras antivuelco son un elemento de seguridad pasiva muy recomendable. No sólo hacen falta barras antivuelco si destinamos nuestro vehículo a pruebas de trial 4x4 o competiciones de rallye, también son recomendables si deseamos realizar pruebas de orientación de tipo amateur con 4x4, tandas en circuitos de velocidad o si simplemente deseamos viajar en familia por zonas con carreteras en mal estado o inexistentes.
Las barras antivuelco suelen estar formadas por una estructura tubular de tubos de acero de sección circular formada por una serie de arcos y tirantes atornillados o soldados entre sí y unidos al bastidor y/o a la carrocería del vehículo. En vehículos con chasis independiente, como pueden ser algunos 4x4 y camiones, la barras deben anclarse directamente al chasis, ya que la carrocería no tiene la resistencia suficiente para soportar los esfuerzos producidos sobre las barras por un posible vuelco. En vehículos con chasis autoportante las barras se anclan directamente a los puntos más resistentes de la estructura.
Las barras antivuelco pueden estar instaladas en el interior o en el exterior de la carrocería del vehículo, y en este último caso también pueden disponer de uno o varios arcos interiores.
Barras exteriores
Las barras exteriores son recomendables para vehículos todo terreno, así, además de proteger a los ocupantes en caso de accidente, las barras también protegen la carrocería del vehículo en caso de pequeños vuelcos o golpes que pueda recibir ésta durante la circulación por vías o caminos en mal estado.
Además, otra ventaja de las barras exteriores es que no restan espacio en el interior del vehículo, hecho muy útil o casi imprescindible en vehículo de tamaño pequeño o con interiores poco amplios como pueden ser los Suzuki Samurai/Santana o los Land Rover Defender.
La estructura de barras antivuelco se coloca en el exterior de la carrocería y puede ser atornillada al parachoques y taloneras del vehículo o puede ser atornillada directamente al chasis del vehículo atravesando la carrocería de éste. Al situarse exteriores a la carrocería las barras tiene que cumplir con la normativa sobre salientes exteriores a fin de evitar posibles daños a otros usuarios de la vía.
Barras interiores
Las barras antivuelco interiores en todo terrenos son utilizadas en vehículos con interiores amplios, como pueden ser los Toyota Land Cruiser u otro tipo de vehículo donde haya espacio suficiente para que la barras no interfieran en el espacio ocupado por los usuarios y así evitar que éstos, en caso de accidente, puedan golpearse con las barras que forman la estructura antivuelco.
En turismos, al disponer de un habitáculo más pequeño, lo más común es instalar la estructura de seguridad detrás de los asientos delanteros. Normalmente también es necesario eliminar las plazas posteriores del vehículo ya que la instalación de los tirantes posteriores provoca que no quede espacio para sus ocupantes, además de no cumplir con las directivas de condicionamiento interior para estas plazas.
Anclaje de la estructura de seguridad al vehículo
En ambos casos cada pie de la estructura de barras antivuelco tiene que presentar unas pletinas para ser unida a la estructura del vehículo. Hay que asegurar que estas pletinas sean lo suficientemente grandes para repartir correctamente los esfuerzos producidos sobre las barras en caso de vuelco, evitando así el punzonamiento de la estructura del vehículo. De esta forma se evita que las barras puedan atravesar la carrocería o el bastidor del vehículo en caso de vuelco dejando de cumplir la función para la cual fueron instaladas. Siempre es recomendable que las uniones entre las pletinas de la barras antivuelco y la estructura del vehículo sean uniones atornilladas, evitando soldaduras, de esa manera no debilitar el material base debido a la aportación de calor durante el proceso de soldadura.
Homologación de barras antivuelco
Para la homologación de barras exteriores habrá que tener en cuenta que estas cumplan con las normativas de salientes exteriores, presentando formas redondeadas y sin aristas vivas o cortantes que puedan provocar daños a otros usuarios de la vía.
Siempre que hayan barras antivuelco dentro del habitáculo habrá que asegurar que haya la distancia mínima de 90cm entre el punto A (ver imagen) y cualquier punto de las barras antivuelco situado por delante del respaldo de cada una de la plazas.
Además, todas aquellas barras que no queden por detrás de los respaldos de cada plaza de asiento deberán ir recubiertas con algún elemento blando tipo espuma o goma. En la zona destinada a carga, donde no habrá asientos, no será necesario recubrir las barras.
Independientemente de que se instalen barras exteriores o interiores, no se podrá tapar ni obstruir la abertura de ninguna de las puertas del vehículo. De esta manera, unas barras como las que se muestran en la siguiente fotografía no se podrán homologar en un vehículo de calle, permitiéndose solamente en aquellos vehículos clasificados como de rally o competición.